Niño que ronca

El ronquido constante puede afectar la salud a largo plazo de su hijo

¿Alguna vez has oído a tu pequeño roncar? Es un poco cómico escuchar un fuerte ruido que sale de la pequeña boca de un niño pequeño. A veces puede ser un poco triste también, si los ronquidos se deben a una congestión fría o severa. Sin embargo, es posible que no se dé cuenta de que ese sonido tonto o ligeramente tenso podría en realidad ser un signo de un problema grave de salud o un peligro que podría afectar el desarrollo de su niño pequeño.

Ronquido y desarrollo cognitivo

Los investigadores y los pediatras están pidiendo cada vez más que se preste más atención al ronquido en los niños. En los últimos años, los científicos han descubierto que los niños mayores que roncan pueden tener un mayor riesgo de trastornos cognitivos, conductuales y psicosociales. Ahora, los estudios sugieren que los niños de hasta 2 años que roncan regularmente pueden ser más propensos a sufrir problemas cognitivos y de conducta.

Un estudio de 2012 de niños pequeños y el ronquido persistente encontró que los niños que roncaban fuerte y con regularidad tenían más problemas de comportamiento y tenían más probabilidades de sufrir hiperactividad, depresión y problemas de atención. El estudio rastreó a niños de 2 a 3 años para comparar a aquellos que roncan ocasionalmente o no roncan con aquellos que roncan fuerte y consistentemente durante meses o años.

Un estudio por separado mostró que los niños pequeños con apnea del sueño o trastornos respiratorios durante el sueño, que podrían estar indicados por los ronquidos, tenían entre un 20 y un 60 por ciento más de probabilidades de tener problemas de conducta antes de los 4 años.

Tenían entre un 40 y un 100 por ciento más de probabilidad de tener esos problemas antes de los 7 años. Cuanto peor era su condición, peor eran los problemas.

El motivo de estas diferencias, según algunos expertos, es que los niños que roncan pueden tener períodos de hipoxia; durante esos episodios se ven privados de oxígeno, lo que conduce a cambios en la función y el comportamiento del cerebro.

Por lo tanto, la respiración alterada durante el sueño durante el desarrollo temprano de su hijo puede tener efectos duraderos.

Lo que puedes hacer

Primero, tenga en cuenta lo que no debe hacer, pánico. Sin embargo, si nota que su hijo ronca mientras duerme, debe prestarle atención. Trate de identificar qué tipo de ronquido está haciendo su hijo. ¿Es un problema respiratorio temporal provocado por la congestión? ¿Es muy fuerte y notable o solo una leve respiración? ¿Sucede noche tras noche (y durante las siestas)? Casi todos los niños roncan en algún momento de sus vidas, pero en la mayoría de los casos, es temporal e inofensivo. Alrededor del 10 por ciento de los niños ronca todas las noches.

Si cree que su hijo pertenece a esa categoría del 10 por ciento, hable con su pediatra sobre la evaluación de su hijo para el síndrome de apnea obstructiva del sueño (SAOS). Esto generalmente implica tener un examen ORL pediátrico para ver si las amígdalas y las adenoides están agrandadas. Si es así, es posible que su médico quiera hacer un estudio del sueño (un polisomnograma) para confirmar el diagnóstico. Cuando sea necesario, su médico puede recomendar una amigdalectomía y una adenoidectomía que extirpen las amígdalas y las adenoides. En algunos casos, los niños deben ser tratados con un dispositivo similar a una máscara que proporciona presión de aire constante a través de la nariz y alivia los problemas que causan los ronquidos.

Ciertos factores ponen a los niños pequeños en mayor riesgo de apnea del sueño y ronquidos. Los niños y los niños afroamericanos son más propensos a desarrollar el problema. También corren un riesgo más alto los niños con síndrome de Down o condiciones médicas que resultan en un desarrollo irregular de cráneo o facial.

Además, existen condiciones ambientales y de estilo de vida que puede controlar para reducir las posibilidades de que su hijo se convierta en un roncador persistente:

La conclusión es que el sueño es especialmente importante para el desarrollo saludable de un niño. El ronquido interrumpe el sueño de un niño, lo que interrumpe su desarrollo cerebral natural y su bienestar general. Identificar un problema con la respiración desordenada del sueño tan pronto como sea posible ayudará a su hijo a evitar problemas cognitivos y de comportamiento en el futuro y permitirá que todos en la familia tengan una noche de sueño más reparador.

Fuentes:

Ronquidos persistentes en niños en edad preescolar: predictores y correlatos conductuales y de desarrollo. Pediatría 13 de agosto de 2012.

Respiración con trastornos del sueño en una cohorte poblacional: resultados conductuales a los 4 y 7 años. Pediatría 5 de marzo de 2012.