8 Habilidades para padres que promueven la disciplina más efectiva

Habilidades que enseñan a los niños cómo manejar sus comportamientos

Si bien nadie va a ser un padre perfecto, algunos padres tienen habilidades parentales más agudas que otros. Pero la buena noticia es que todos pueden mejorar sus habilidades en cualquier momento. Y siempre hay espacio para una pequeña mejora.

Los libros para padres, las clases y los grupos de apoyo pueden ser excelentes recursos para ayudar a los padres a mejorar sus habilidades. Pero la clave para mejorar es el trabajo duro, la dedicación y el compromiso de ser el mejor padre posible.

Los padres que tienen la intención de criar a sus hijos para que se conviertan en adultos responsables tienen un cierto conjunto de habilidades parentales en su haber. Y están perfeccionando constantemente sus habilidades en un esfuerzo por mejorar.

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Reconocer problemas de seguridad
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Los padres más eficaces parecen ser capaces de detectar el peligro a una milla de distancia. Están bien versados ​​en la seguridad de Internet, el último equipo de seguridad y reconocen una mala idea cuando lo escuchan.

Encuentran un equilibrio entre ser sobreprotector y poco involucrado. Permiten las consecuencias naturales solo cuando es seguro hacerlo y les enseñan habilidades a los niños para tomar decisiones saludables.

Su objetivo final es enseñar a su hijo a reconocer los problemas de seguridad por sí mismo, para que pueda protegerse a sí mismo cuando sus padres no están cerca para decirle qué hacer.

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Proporcione un ejemplo positivo

Los padres que dicen: "Haz lo que digo, no lo que hago", no son efectivos. Los niños aprenden mucho más de lo que hacen sus padres, en lugar de escuchar lo que dicen.

Aunque puede ser difícil establecer límites de tiempo en el uso de sus productos electrónicos y usar palabras educadas incluso cuando está enojado, es importante recordar que su hijo siempre está mirando. Modelar conductas apropiadas es una habilidad esencial para los padres.

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Establecer límites apropiados

Saber cuándo decir no y cómo cumplir con tus límites es una habilidad que requiere práctica. Con el tiempo, sabrá cuánto puede manejar su hijo y cómo ayudarlo a sobrellevar la decepción cuando no le deje hacer algo que quiere hacer.

Todos los niños son diferentes y solo porque un niño tiene cierta edad no necesariamente significa que esté listo para privilegios específicos. A veces, establecer límites implica una pequeña prueba y error a medida que los padres descubren cómo ayudar a un niño a aprender mejor.

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Hacer cumplir las consecuencias consistentemente

Los padres efectivos no solo amenazan con las consecuencias, sino que las cumplen. La consistencia es una parte vital de ayudar a los niños a aprender a manejar mejor su comportamiento.

Si un niño solo recibe consecuencias negativas por su comportamiento la mitad del tiempo, es probable que el mal comportamiento no desaparezca. Pero, las consecuencias claras y consistentes ayudarán a un niño a aprender.

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Elija Batallas Sabiamente

La disciplina efectiva requiere que los padres puedan reconocer si vale la pena pelear una batalla. Algunas veces los comportamientos simplemente no vale la pena abordarlos si es probable que conduzcan a una lucha de poder .

Por ejemplo, si un niño de 6 años quiere usar sus chanclas de lluvia en un día soleado, permitirle hacerlo podría tener más sentido que tratar de convencerla de por qué sus tenis son una mejor opción. Concéntrese en los problemas de comportamiento más grandes si realmente quiere marcar la diferencia.

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Administre el estrés de manera efectiva

Los padres que manejan su estrés de manera efectiva están mejor equipados para lidiar con problemas de conducta. Los padres estresados ​​son más propensos a gritar o ser inconsistentes con la disciplina.

Los padres estresados ​​también son más propensos a usar el castigo en lugar de la disciplina . Y puede conducir a un ciclo insalubre, ya que es más probable que los niños actúen peor cuando un padre está estresado. El manejo saludable del estrés incluye el cuidado personal y el apoyo de amigos y familiares.

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Proporcionar atención positiva

Encontrar tiempo para prestar atención diaria a los niños puede marcar una gran diferencia en la vida del niño. Unos pocos minutos de atención positiva también hacen que otras estrategias disciplinarias sean mucho más efectivas.

Sin embargo, es una habilidad crear tiempo individual para un niño. Pero puede marcar una gran diferencia para el bienestar general de un niño.

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Establecer claras expectativas

Cuando los niños no entienden qué se espera de ellos, puede ser imposible que cumplan con las expectativas de los padres. Los padres más efectivos pueden explicar sus expectativas.

Un padre efectivo simplemente no le dice a su hija de diez años que limpie su habitación. En cambio, ella describe cómo es una habitación limpia diciendo: "Levanta tu ropa del suelo, prepara tu cama y aspira la alfombra".