Darles a los niños lo que quieran no es saludable. De hecho, abusar de los niños en realidad constituye negligencia y puede tener consecuencias de por vida para muchos niños.
Tipos de exceso de indulgencia
Abrumar a los niños va más allá de simplemente comprarles demasiados obsequios en días festivos. Los investigadores del Proyecto Overindulgence han identificado tres tipos de indulgencia excesiva:
- Dar demasiado Ya sea que haya demasiados juguetes, demasiadas actividades o demasiados productos electrónicos, darle demasiado a un niño puede ser perjudicial. Los niños necesitan tiempo de inactividad y también necesitan oportunidades para aprender a entretenerse.
- Sobre-nutrir. Los padres que hacen demasiado por sus hijos les impiden aprender las habilidades que necesitan para ganar independencia. Hacer la tarea de un niño para él o rescatarla de todas las emociones incómodas puede interferir con el desarrollo saludable.
- Estructura blanda No dar a los niños suficiente disciplina o límites saludables puede evitar que se conviertan en adultos autodisciplinados . Esto puede incluir no dar las tareas de un niño o ceder cada vez que ella lanza una rabieta .
Razones por las que los padres abusan de los niños
Hay muchas razones por las que los padres abusan demasiado de los niños. La razón más común es la culpa. Un padre que trabaja muchas horas puede no querer hacer cumplir las tareas cuando llega a casa del trabajo.
O bien, un padre que no tiene la custodia puede tratar de compensar el hecho de no estar presente comprando muchos regalos a un niño.
Otra razón común es que los padres quieren que los niños sean "felices". Entonces, en lugar de decir que no y arriesgarse a molestar a sus hijos, se rinden y les dejan tener lo que quieran.
Algunas veces los padres están mal equipados y no están preparados para lidiar con problemas de conducta.
No saben cómo responder a las rabietas y el desafío . Entonces, para facilitar la vida en el corto plazo, hacen todo lo posible para evitar disciplinar a sus hijos.
Finalmente, algunos padres quieren compensar sus malas experiencias infantiles. Un padre que creció en la pobreza puede querer asegurarse de que su hijo no "se quede sin". O un padre que creció con padres realmente estrictos puede ir al otro extremo y no darle al niño la estructura suficiente .
Por qué excederse en los niños no es saludable
Aquí hay algunas razones por las que es posible que desee pensar dos veces antes de darle a su hijo todo lo que quiere:
- Su hijo debe aprender la diferencia entre los deseos y las necesidades. Cuando los niños reciben todo lo que desean, comienzan a pensar que no pueden vivir sin el último dispositivo o que no pueden sobrevivir sin zapatillas nuevas.
- Su hijo puede pensar que la felicidad proviene de los bienes materiales. Es fácil para los niños comenzar a pensar que tener más cosas los ayudará a llevar una vida más satisfactoria.
- Puede enviar un mensaje de que existe un vínculo entre el valor neto y la autoestima. Las posesiones materiales pueden convertirse en un símbolo de estatus para los niños que piensan que es importante mostrar cuánto tienen.
- Es posible que su hijo no valore nada. Cuando los niños tienen muchos artículos electrónicos, ropa y juguetes, no pueden cuidarlos. A un niño no le importa cuando las cosas se rompen y puede que no note cuando se pierden objetos. Por lo tanto, su hijo no aprenderá a ser responsable.
- La falta de disciplina les enseña a los niños que no tienen que seguir las reglas. Cuando las reglas no se aplican, los niños comienzan a creer que las reglas no se aplican a ellos. Creen que están por encima de las reglas y comienzan a creer que son más especiales que los demás.
- La investigación muestra consistentemente que los niños indulgentes luchan con problemas de por vida. Los adultos que fueron abusados cuando eran niños reportan sentimientos crónicos de descontento. Muchos de ellos informan comer en exceso y gastar en exceso. Además, muchos de ellos informan infelicidad crónica y problemas para hacer frente a la realidad.
Poner fin a la exageración
Si eres culpable de abusar demasiado de tu hijo, elige crear un cambio positivo en tu familia.
Comprométase a poner fin a los comportamientos poco saludables que son dañinos para su hijo.
Cuando comienza a decir que no, y deja de consentir demasiado a su hijo, es probable que vea un aumento en los problemas de conducta. Es probable que su hijo tome represalias y haga todo lo que esté a su alcance para socavar sus esfuerzos. Pero si puede cumplir sus reglas, le enseñará a su hijo las valiosas habilidades para la vida que necesita para convertirse en un adulto responsable.