La fatiga durante el embarazo es absolutamente normal, especialmente en los primeros meses y el último trimestre. Para algunas mujeres, la fatiga es abrumadora; para otros, es relativamente leve. De cualquier manera, es parte del proceso de hacer un bebé.
¿Por qué se produce la fatiga durante el embarazo?
Durante el primer trimestre , su cuerpo está trabajando horas extras, creando una placenta y acelerando para proporcionar la nutrición y el apoyo que necesita un bebé en crecimiento.
Su metabolismo aumenta, al igual que su flujo sanguíneo, por lo que su cuerpo necesita más que su asignación habitual de nutrición y descanso. El primer trimestre también puede ser un momento de cambios de humor inducidos por hormonas. Estos pueden ser agotadores en sí mismos, especialmente si está tratando de evitar derramar los frijoles sobre su embarazo hasta después de que el primer trimestre se complete con seguridad.
Durante el segundo trimestre, su cuerpo se nivela un poco. Sí, todavía está comiendo y durmiendo "por dos", pero ahora que la placenta se ha formado y su cuerpo se ha ajustado un poco, puede sentirse un poco más enérgico. Este es un buen momento para preparar el vivero y completar cualquier tarea importante en su agenda, ¡ya que no se sentirá así de nuevo por un tiempo!
A medida que avanzas hacia el tercer trimestre, comenzarás a sentir fatiga nuevamente. Esta vez, las razones son más evidentes:
- Lleva mucho peso, todo el tiempo. Y ese bebé se pone cada vez más pesado.
- Probablemente estés teniendo dificultades para dormir por la noche, debido a los movimientos del bebé y la dificultad para sentirte cómodo.
- Puede estar teniendo dificultades con la digestión y la eliminación.
- Cada movimiento ordinario se vuelve más extenuante ya que debe trabajar alrededor de un abdomen en crecimiento y, en algunos casos, de tobillos hinchados y otros problemas físicos.
- Es posible que experimente calambres nocturnos y "piernas inquietas", otra razón por la cual puede evitarle el sueño.
- La ansiedad sobre el parto puede comenzar a dificultar la relajación y es más difícil conciliar el sueño.
Cómo combatir la fatiga
Afortunadamente, el embarazo es un momento en que los amigos y la familia a menudo se movilizan para facilitarle las cosas a la madre. Si te sientes agotado, aprovecha cualquier ayuda que otros te ofrezcan. A medida que se hace más grande, es más difícil hacer frente a las tareas cotidianas del hogar, así que solicite o contrate apoyo. Además, estos consejos pueden ayudar:
- Tome una pequeña siesta cuando pueda, pero no tanto que interfiera con su descanso nocturno.
- Acuéstese a la misma hora todas las noches.
- Levántese aproximadamente a la misma hora todos los días.
- Haga ejercicio todos los días, pero no después de la cena. Considere una clase de aptitud física prenatal y evite las actividades extenuantes (especialmente el levantamiento de pesas).
- Evita la cafeína.
- Verifique su nutrición y coma comidas pequeñas y nutritivas durante todo el día.
- Mantente hidratado.
Cuándo llamar al médico
Si bien es normal sentirse cansado durante el embarazo, un aumento repentino de la fatiga no es normal. Esto puede ser una señal de que algo no está bien con su embarazo. Otros problemas que pueden surgir incluyen la fatiga relacionada con la depresión o la fatiga debido a la anemia (falta de hierro en la sangre).