9 estrategias de autodefensa para evitar intimidación

Cómo los niños pueden defenderse contra los ataques de matones

¿Sabía que si su hijo no está preparado para la intimidación o desconoce su entorno, es más probable que sea el objetivo? Nadie quiere que su hijo esté indefenso cuando se trata de intimidación. Pero si no preparas a tus hijos con anticipación, lo harán. Hable con sus hijos sobre cómo lidiar con la intimidación antes de que suceda. Discuta la importancia de evitar los puntos conflictivos, cómo mantenerse a salvo en el autobús y cómo hacer frente a los agresores .

También equiparlo con algunas técnicas de autodefensa.

Cuando la mayoría de las personas piensa en defensa propia, piensan en responder. Pero una gran parte de la autodefensa no tiene nada que ver con golpear o golpear a otra persona. Implica ser consciente de su entorno, escuchar su intestino, irse antes de que surja un problema, usar una voz segura y comportarse con confianza. Aquí hay nueve estrategias que los niños pueden usar para defenderse contra los agresores de la escuela.

Use lenguaje corporal seguro.

Una de las mejores formas de prevenir la intimidación es asegurarse de que sus hijos tengan una autoestima saludable y que se porten con confianza. Ser seguro de sí mismo implica tener una buena postura, caminar con un propósito y hacer contacto visual con quienes lo rodean. Por el contrario, si los niños se quedan atrás y evitan mirar, esto los hace parecer débiles y fáciles de atacar. Trabaja con tus hijos en estas técnicas. Y recuérdeles que incluso cuando no se sientan seguros, como entrar por primera vez en un comedor abarrotado, deben caminar como lo hacen.

Quédate en un grupo

Los agresores son menos propensos a atacar a alguien que está con un grupo de amigos. Asegúrese de que su hijo sepa que lo mejor es ir a lugares en grupos, especialmente a lugares de intimidación en la escuela. Si su hijo no tiene un grupo de amigos, trabaje con él para desarrollar amigos . La amistad es un factor de protección contra el acoso escolar .

Incluso un amigo cercano puede recorrer un largo camino para prevenir la intimidación.

Confia en tu instinto.

Enseñe a sus hijos a estar al tanto de su entorno. Pídales que guarden sus teléfonos celulares y miren a su alrededor. ¿Hay un grupo de chicos rudos en la esquina? ¿Hay un auto extraño en la parada del autobús? ¿Qué hay del hombre detrás de McDonald's que mira todos sus movimientos? ¿Estas cosas hacen sonar las alarmas dentro? ¿Algo no se siente bien en la boca del estómago? Ser consciente de lo que sucede a su alrededor y confiar en sus instintos, no solo ayudará a proteger a sus hijos de la intimidación , sino que también es una habilidad vital importante. Ser consciente de lo que sucede a su alrededor puede ayudarlos a evitar ser asaltados o atacados también como adultos.

Céntrate en el vuelo, no en la lucha.

Demasiadas veces, los niños no se dan cuenta de que cuando las cosas se ven como si pudieran ir en la dirección equivocada, deberían dar media vuelta y marcharse. Asegúrese de que sepan que no es cobarde alejarse. En cambio, recuérdeles que se necesita coraje para alejarse de una situación que se está intensificando. Haga hincapié en sus hijos que necesitan dejar una situación antes de que se les vaya de las manos. Identificar cuándo una situación está a punto de empeorar y marcharse es una de las mejores maneras de evitar situaciones de intimidación.

Usa una voz fuerte.

Si su hijo se encuentra en una posible situación de intimidación, a veces usar una voz segura y ser asertivo va a diluir la situación. Muchas veces, los matones están buscando un objetivo fácil. Y una fuerte voz segura puede hacer que los agresores retrocedan. Haga que sus hijos practiquen hablar con firmeza y con una voz fuerte en casa. Entonces, cuando se encuentren en una situación difícil, vendrá naturalmente.

Mantenga sus ojos en la salida.

A veces, los niños entrarán en una situación en la que no podrán marcharse inmediatamente. Tal vez su camino está bloqueado o sienten que no es seguro huir.

En este caso, aún deberían buscar una salida y cuando se presente la oportunidad, hagan un descanso. Recuérdeles que no es señal de debilidad escapar de un matón. De hecho, se necesita valor y fuerza. También los mantiene a salvo.

Atraer la atención.

Asegúrese de que sus hijos sepan que es aceptable y se les anima a hacer mucho ruido si alguien los amenaza o los lastima. No solo deben usar una voz fuerte, sino que también pueden gritar, gritar o gritar. La idea es asustar a un bravucón atrayendo mucha atención a la situación, especialmente de adultos o profesores. Esta táctica también es importante si un niño es atacado por un extraño durante un intento de secuestro. Ser callado y sumiso nunca es una buena idea.

Toma una clase de defensa personal.

A veces, lo mejor que puede hacer por sus hijos es inscribirlos en una clase de autodefensa. Por ejemplo, la Asociación Americana de Taekwondo ofrece una serie de opciones diseñadas específicamente para niños. Los niños no solo aprenderán a defenderse, sino que también aprenderán a tener confianza y autocontrol. Muchas veces, difundir situaciones de intimidación implica saber cómo responder a una situación de una manera calmada y segura antes de que llegue el momento del acoso físico .

Utiliza técnicas de autodefensa.

Aunque nunca es una buena idea alentar a su hijo a pelear, existen ciertas técnicas de autodefensa que pueden usar para protegerse cuando son atacados. Por ejemplo, hay técnicas para bloquear un golpe que se lanza contra ellos. También hay técnicas para quitar los dedos de un matón de sus muñecas, así como técnicas sobre cómo liberarse al ser restringido. Y hay técnicas sobre cómo pueden defenderse de un ataque grupal. Todas estas estrategias se pueden aprender en una clase de autodefensa.

Recuerde, cuando enseñe a sus hijos sobre las habilidades de autodefensa contra los agresores, aliéntelos a difundir la situación usando una voz fuerte o alejándose. Además, consulte con su distrito escolar sobre sus políticas sobre defensa personal. Algunas escuelas tienen una política de cero tolerancia y suspenderán tanto al agresor como a la víctima cuando se produzca intimidación física. Asegúrese de comprender el posible resultado cuando sus hijos se defienden.